Creemos que el principio básico que fundamenta el desarrollo del niño en cada área, es el autocontrol y la autonomía. Por lo tanto si no iniciamos fortaleciendo el propio control del cuerpo en el espacio y el conocimiento del mismo, será muy difícil que el niño se adapte a las diferentes terapias y muestre resultados.
A través de la experiencia de gimnasio cerebral, creamos una alternativa a las terapias tradicionales de fonoaudiología, ocupacional y psicología. Somos respetuosos de sus aportes, pero consideramos que debe ser un trabajo integral, en donde el niño maneje en forma apropiada el tiempo, tome decisiones, eligiendo el propio material que necesita y conozca sus debilidades y fortalezas. En ocasiones subvaloramos hasta donde el niño puede entender sus propios déficits y que debe hacer para fortalecerlos.
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